Hay jugadores de épocas más antiguas en los que no se sabe con exactitud su fecha de ingreso al club al no haber tantos datos de los equipos filiales, camisetas del chelsea 2024 al contrario que hoy en día. Fue también la época en la que con los fabriles llegó a jugar un mito como Telmo Zarra, el máximo goleador de la historia de la Liga española, que se retiró en el Baracaldo. Sería la segunda final en 12 años, y la cuarta a lo largo de su historia. El jugador italiano falló su lanzamiento, y por la conversión del último lanzador checoslovaco Jozef Barmoš, Italia perdía el encuentro y finalizaba en cuarta posición de la Eurocopa. En la reanudación de los últimos 15 minutos, Müller empataba el encuentro, y tan solo un minuto después el ídolo italiano Gianni Rivera daba el que a la postre supondría el pase a la final para los mediterráneos. Los Zoff, Cabrini, Gentile, Scirea, y Rossi salieron dispuestos a vencer a los brasileños que les privaron de conquistar el Mundial de México 1970. Así se adelantaron los italianos al minuto 38 gracias a un gol de Franco Causio, con el que se llegó al final de la primera parte.
Pese a superar la primera clasificación del Grupo 6 de la fase de grupos ante la selección austríaca, la selección sueca y la selección irlandesa, la actual subcampeona mundial y vigente campeona europea, camisetas de futbol baratas perdería en el decisivo partido para acceder a la fase final a los que resultarían ser los anfitriones: la selección belga que les derrotó por un 2-1 global que consiguieron en el partido de vuelta. De nuevo Polonia, en el penúltimo partido de grupo, les «robaría» un punto tras el empate a un gol que de nada servía a ninguna de las dos selecciones, y que llevaría a los Países Bajos a clasificarse para la segunda fase clasificatoria, y finalmente terminar tercera de la Eurocopa balcánica primera celebrada en la Europa del Este. En ellas, Rossi se erigiría nuevamente en la figura del partido al anotar los dos goles que darían a Italia el triunfo por 2-0 frente a la selección polaca (sorprendente semifinalista tras eliminar a la selección soviética y a la selección belga), y el pase a la ansiada final.
La suerte la encuadró en el Grupo A con la selección polaca, la selección camerunesa y la selección peruana. Una Italia, en la que aparecía un joven Paolo Rossi, ganó todos sus partidos con gran solvencia, y accedió como primera de grupo a la siguiente fase del torneo. Los balcánicos llegan muy envalentonados a la final tras haberse deshecho por el camino de grandes combinados como la reciente Campeona del Mundo, Inglaterra. Los italianos dirigidos por Ferruccio Valcareggi, buscaban de nuevo esa supremacía a nivel de selecciones, y había visto como en los últimos treinta años sus grandes logros habían sido igualados, y pese a haber perdido ese dominio futbolístico en el terreno de juego, aún podía presumir de ser una de las pocas selecciones en haberse proclamado campeona mundial, incluso por dos veces. Posteriormente fue nombrado en 2012 el mejor club ruso en los 20 años del país tras la extinción soviética.
Todos deben ganarse la clasificación, y es entonces cuando se decide el país que albergará la fase final del torneo que seguirá constando de semifinales, partido por el tercer y cuarto puesto, y la final. El decisivo partido frente a los belgas finalizaría con otro empate a cero goles que servía para clasificar a ambos conjuntos, pero desgraciadamente con los italianos por detrás de los belgas merced al «goal-average» acumulado en la fase de grupos, por lo que los transalpinos disputarían el tercer puesto de su Eurocopa frente a la selección checoslovaca. En esta edición se dieron tres nuevas circunstancias: la participación de dos selecciones alemanas, la Alemania Federal y la Alemania Democrática, la participación de la tercera selección africana en manos de Zaire tras la participación egipcia en 1934 y la participación de Marruecos en México 1970 y la aparición por primera vez la actual versión del Trofeo de la Copa Mundial de Fútbol. En paralelo con las creaciones de las nuevas confederaciones se comenzaron a disputar los primeros torneos regionales de selecciones, excepto por la Confederación Sudamericana de Fútbol, que ya disputaba su Campeonato Sudamericano de Selecciones desde 1916. En 1956 la Confederación Asiática de Fútbol realizó la primera edición de la Copa Asiática, y al año siguiente la Confederación Africana de Fútbol organizó la Copa Africana de Naciones.